El Indicador para Turistas de 1930
He aquí un folleto turístico cuando todavía no recibían ese nombre. Allá por 1930 ya se habían publicado dos guías de turismo muy serias: la del Museo Municipal de Arte de 1923, y la Guía Larrañaga de 1929. Además habían visto la luz un buen número de opúsculos con mayor o menor enjundia y fortuna en el por entonces ignoto arte de orientar e ilustrar a los muy escasos turistas que se dejaban caer por la impertérrita ciudad de Cuenca. Éste que nos ocupa hoy es obra menor, no hay duda, pero pintoresca. El pequeño plano que adjunta, además de ser de los muy primeros planos turísticos de Cuenca, es una colección de singularidades. Todavía se dibujan las dos manzanas de casas en el barrio del Alcázar (aunque ya estaban arruinadas) y la larga fila de viviendas entre Zapaterías y Alfonso VIII, que no le iba a la zaga. Una calle de Colón con los cerrillos de los Moralejos a sus espaldas. Unos barrios de San Antón y Tiradores apenas esbozados, a la espera de recibir el éxodo rural de