Consuegra
Consuegra es un destino turístico al que desde Cuenca vamos poco. No es únicamente por la distancia, que ya es muy respetable, sino también porque en esta deslavazada comunidad autónoma, el turismo participa de la tónica general y adolece de una desvertebración evidente. Poner el centro de gravedad de la promoción turística regional desde hace muchos años en un manido tópico cervantino (por muy universal que sea), tampoco ayuda mucho, pese a que pueda parecer lo contrario. I ncluso las pocas veces al año que desde Cuenca llevamos grupos a Ciudad Real o Almagro, es raro que la ruta toque Consuegra, que está un tanto apartada y supone unos kilómetros más a una ruta ya muy cargada. Es una lástima, porque es un destino que funciona y que supone un alto grado de satisfacción a nuestros distinguidos clientes. De entrada, escenográfico no lo puede ser más, con la estampa de los doce molinos sobre el Cerro Calderico, manchega donde las haya, con su hilera de cuerpos blancos truncada